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IMPOSIBLE
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By Yushi *:.
-...
Por que... por que... ¡¿Por qué
...!?
Gritó
con desesperación el más joven de la dinastía Tao mientras estrechaba contra
su pecho el cuerpo inerte de la
persona que más había amado en toda su vida; comenzaba a perder aquella
calidez de manera veloz, su vida había terminado abruptamente, su corazón dejó
de latir...
Ren
Tao no podía contener sus lágrimas abrazándola a ella, no podía concebir la
idea de perderla ahora que sabía toda la verdad...
Aún
sentía el suave tacto de su tersa mano sobre el rostro; aún podía sentir
sobre sus labios ese último beso con el que se había despedido...
Su
alma había obtenido el descanso eterno, el joven no quiso pensar que sería del
cuerpo de su amada, siendo ellos una familia que acostumbraba crear seres no
vivos de los muertos... ¿Sería capaz de quemar ese hermoso cuerpo?, ¿de
privarse para siempre de esa juvenil belleza para cumplirle el último deseo?
Ren no quería pensar en eso, no ahora. Habían tantas dudas en su cabeza que
ensombrecían su corazón cada vez
mas...
¿Por
qué ella había ocultado ese secreto durante tanto tiempo...?
¿Por
qué había tomado esa precipitada decisión de morir por él...?
¿Por
qué... ¡Por qué!?
Las
preguntas brotaban con gran rapidez, surgían una tras otra arremolinándose en
su interior, tal y como las lágrimas se acumulaban en sus ojos para finalmente
resbalar por su triste rostro. El dolor de su corazón iba en aumento pues Ren
sabía que nunca encontraría a
nadie igual a ella, porque ella era la única y siempre sería así en su corazón...
Estaban
ahí solos, como en tantas otras ocasiones mas, Ren acarició el pálido rostro
de su amada, con la misma ternura con que ella siempre lo había acariciado. Él
siempre la había querido de esa manera sin importarle lo que dijeran los demás;
la había amado en secreto todo este tiempo, para no alejarla de su lado;
siempre había permanecido a su lado, la había acompañado a cada momento sin
saber que sus sentimientos eran correspondidos, sin sospechar siquiera que ese
amor que él mismo había juzgado como imposible, había tenido mucha
posibilidad de volverse real...
¿Por
qué ella se lo había ocultado?, ¿acaso ella había sentido el mismo temor de
no ser correspondida?, ¿o era temor al que dirían los demás...? Ya nada de
eso tenía importancia ahora, ella ya no estaba ahí y no había manera de que
le respondiera... Ren miró nuevamente aquel hermoso aunque inerte rostro, sus pálidos
labios mantenían una sonrisa que nunca desaparecería de su mente. Mientras la
observaba, anhelando que abriera nuevamente sus ojos, una nueva e inquietante
duda lo invadió: ¿acaso ella deseaba morir... Tan pesada era la carga de aquel
secreto que había preferido quitarse la vida...?
Ren
no pudo evitar que un sollozo brotara de su garganta ni que un par de lágrimas
suyas cayeran sobre el inmaculado rostro de ella, la sola idea de que su amada
deseara morir le partía el corazón ya de por sí lastimado.
-
Debiste decírmelo June, si lo hubieras hecho todo sería diferente... – le
susurró mientras limpiaba de su rostro las pequeñas gotas que había
derramado.
No
había nadie que le respondiera, no había manera de saber si tenía razón, y aún
así, él estaba seguro de que las
cosas hubieran sido distintas. Si June, esa chica a quien siempre había creído
su hermana, le hubiera confesado antes su secreto de ser hija adoptiva tal vez
su amor hubiera sido posible, podrían haber estado juntos y no
se hubieran visto en la necesidad de ocultarse mutuamente aquel
sentimiento...
Ahora
que la había perdido, ya nadie lo consolaría, se recriminaba su muerte, era su
culpa que ella estuviera muerta ahora... Si tan solo no hubiera estado tan
distraído ella aún seguirán con vida... Los recuerdos comenzaba a
atormentarlo a tan solo unos minutos de ocurrir...
Todo
había pasado demasiado rápido frente a sus ojos, no había tenido siquiera
tiempo para reaccionar. Un sujeto había salido de la nada exigiendo cobrar una
venganza de la que Ren no tenía la menor idea y que le había arrebatado lo más
valioso... No hubo nada que Ren hubiera podido hacer, el impacto había dado de
lleno al corazón de June que para protegerlo se había interpuesto entre los
dos. El jovencito solo atinó a soltar su cuchilla para recibir en sus brazos el
cuerpo de su amada, gritando su nombre...
-Te
vas a poner bien, te recuperarás... – comenzó a susurrarle en el instante en
que ella lo miró
-No
debes mentir Ren... ambos sabemos lo grave que es... – respondió ella a su
vez, un absceso de tos le impidió seguir hablando y se llevó a la boca rápidamente
la mano que pronto se lleno de sangre; al ver la gravedad del asunto, Ren sintió
una fuerte opresión en su pecho...
-No
digas eso hermana, pronto estarás bien... Bason ha ido por Fausto y él se
encargará de curarte... – siguió susurrando él mientras apartaba del rostro
de ella un mechoncito de cabello, pudo ver una ligera sonrisa en su rostro.
-Si
tan solo supieras la verdad Ren... Tu no mereces ser engañado...
-¿Engañado...?
– preguntó sin comprender
-Si...
Creo que es tiempo de que lo sepas Ren... antes de morir, quiero que lo sepas...
-Tu
no vas a morir June, no permitiré que mueras...
-Ren
yo... Yo no soy tu hermana... Cuando era pequeña Enn Tao me adoptó como su
hija en agradecimiento a mis padres, que fueron leales a la dinastía y dieron
su vida por ella... Siempre lo supe pero no tuve el valor para confesártelo, así
como esto que siento por ti... – los verdes ojos de la chica se llenaron
pronto de lágrimas, su voz se atenuaba lentamente mientras que su mano
acariciaba por última vez el rostro del muchacho, que impactado por la noticia
no supo como reaccionar. – Te amo Ren, siempre te he amado... no lo olvides ni
te culpes de mi muerte porque esto es lo mejor para los dos...
-...
¡Pero como puedes decir eso June...! Aún tienes mucho porque vivir, lucha
contra la muerte, hazlo por nosotros...
-...Nosotros...?
Que bello se escucha eso Ren... Pero ya no podrá ser, debemos despedirnos antes
de que sea tarde... Se feliz Ren, muy feliz...
Por
primera vez en toda su vida, los ojos de ese chico se llenaron de lágrimas,
estaba conciente de que su amada decía la verdad, estaba partiendo y no les
quedaba mas que esperar... Sintió sobre su mejilla la mano que tantas veces le
había acariciado, con ese toque sintió también la agonía de su corazón, se
le estaba yendo de las manos, hiciera lo que hiciera, al final, la perdería...
Lentamente
se fue acercando a ella, aún estrechándola entre sus brazos, reteniéndola
solo un poco mas...
-Te
amo...
Sus
labios se unieron por un segundo que pareció ser toda una eternidad, June dejó
escapar su último suspiro y su espíritu atravesó el cuerpo de Ren dándole un
último abrazo, y después...
-...
Por que... por que... ¡¿Por qué
...!?
Gritó
con desesperación estrechando contra su pecho el cuerpo de su amada, comenzaba
a perder la calidez a gran velocidad pues su vida había llegado a su fin, su
corazón había dejado de latir llevándose consigo la última esperanza de un
amor imposible...
~ FIN ~